sábado, 20 de febrero de 2010

ANTONIO PALACIOS. Historicistas

Estudió arquitectura en Madrid y posteriormente fue profesor de dibujo en la Escuela de Arquitectura de Madrid, ciudad que le debe algunos de sus más emblemáticos edificios. La figura de Palacios supuso para la capital la introducción de una imagen moderna: su personal estilo monumentalista, heredero tanto de la obra de Otto Wagner como de la arquitectura histórica española (fue alumno de Ricardo Velázquez Bosco), condicionó en buena medida la percepción urbana de la ciudad.
A él se debe la construcción de las primeras líneas del Metro, y sus diseños de accesos a las estaciones se pueden contemplar hoy en día. En cambio, sus templetes de acceso de la Red de San Luis y Sol fueron desmontados, aunque uno de ellos fue posteriormente reubicado en el parque infantil de su pueblo natal.

El Palacio de Comunicaciones de Madrid
El Palacio de Comunicaciones de Madrid (1904-1918) es una de sus obras más conocidas. Desde finales del año 2007 alberga la sede de la Alcaldía de Madrid. Realizada en colaboración con su socio Joaquín Otamendi, muestra un exterior con fuerte influencia del gótico salmantino y los Entretiens de Viollet-le-Duc, aunque en el sistema estructural y la búsqueda de sinceridad en los acabados interiores así como en el mobiliario, se vislumbran influencias de Wagner y la secession vienesa y de las vanguardias arquitectónicas del momento.
En el encargo del Círculo de Bellas Artes de Madrid (1919-1926), realiza una aproximación personal al problema compositivo del edificio en altura, mediante un esquema orgánico en el que, cada planta y cada uso muestran su volumen y carácter al exterior, usando una regla decreciente en altura que culmina en la torre de los estudios.

Círculo de Bellas Artes de Madrid
El ambicioso programa, sugerido por el propio Palacios convertía al edificio en una "ciudad en miniatura", con una clara referencia a los transatlánticos que proliferaban por aquella época. Otras obras suyas fueron el Banco del Río de la Plata (Banco Central), hoy sede central del Instituto Cervantes (Madrid, 1910-1919), el Hospital de Jornaleros de Maudes (Madrid, 1908), El hospital de Jornaleros de San Francisco de Paula más conocido por Hospital de Maudes (Maudes, 17) se creó en 1916 para ofrecer asistencia gratuita a los jornaleros residentes en Madrid. La iniciativa de construir un hospital para los obreros fue de doña Dolores Romero. El edificio es obra del arquitecto Antonio Palacios. En la Guerra Civil, el Hospital fue incautado por las milicias populares y pasó a conocerse como Hospital de Sangre o de Dolores Ibárruri. Tras la guerra, el Hospital de Maudes funcionó como hospital militar de urgencias de la Primera Región militar hasta 1964, año en que fue abandonado. La reconversión del Hospital de Maudes en dependencias administrativas de la Comunidad de Madrid se logró con una profunda rehabilitación del edificio. Declaraciones de Víctor Izquierdo, arquitecto de la Comunidad de Madrid.



Hospital de jornaleros de Maudes
el Teatro García Barbón de Vigo (1910-1927), el Banco Mercantil e Industrial de Madrid (1933-1945) y el Banco de Viñas Aranda (Vigo, 1942), El edificio, que se terminó en 1944, está situado en la calle Marqués de Valladares, esquina a la calle Reconquista y reúne los trazos comunes a las construcciones comerciales creadas por Palacios: enormes columnas de distribución, amplios miradores de vidrio, superposición de volúmenes, forma achaflanada y templo aéreo. El edificio tiene un estilo clasicista muy cercano a la escuela de Chicago de finales del siglo XIX.
Banco de Viñas Aranda
En la actualidad es sede del Banco de Galicia.
También supo recoger la influencia de la escuela de Chicago (Casa Matesanz en la Gran Vía de Madrid), y supo utilizar los nuevos materiales de su época combinándolos con su concepto monumentalista, sin caer en el puro eclecticismo, utilizando todas las influencias de herramientas de su particular estilo, digno de estudio aparte y de un mayor reconocimiento dentro de la historia de la arquitectura del siglo XX.

Casa Matesanz
Palacios también dejó obras interesantes en Galicia, en especial en Vigo y en su Porriño natal, donde se pueden contemplar la Fuente del Cristo, la Botica Nova y la Casa Consistorial, edificio de interesante volumetría cuyo esquema compositivo presenta semejanzas con el Círculo de Bellas Artes. Su distribución en planta aprovecha hábilmente un solar reducido y muy alargado. Una obra temprana y casi desconocida se encuentra en Santiago de Compostela, en la Alameda, edificación que en la actualidad se utiliza como guardería infantil. Otra obra interesante es el "Templo Votivo do mar" en Panjón, en el municipio pontevedrés de Nigrán.Templo construido según proyecto de Antonio Palacios entre los años 1932 y 1937 que se halla cargado de referencias historicistas. Las ruinas de un arco visigodo (siglo VII) que se hallan en este mismo entorno servirán de elemento inspirador para esta gran edificación. La tradición de los canteiros gallegos, el simbolismo metafórico y el colosalismo palaciano se acentúan como características indisociables. El material se potencia hasta conseguir el expresionismo geológico fantástico, lleno de sugerencias y hermandad con el paisaje. El tema arquitectónico de Panzón se basa en la Historia de la arquitectura en Galicia: El megalítico, los castros, el prerrománico y románico, los monasterios mendicantes, los pazos barrocos. Así, la torre actuará como un faro, como una Torre do Oeste defensiva que en su remate proyecta a la rosa de los vientos los 4 ángeles custodios. Contrafuertes, arcos superpuestos tamizando la luz y creando perspectivas, celosías de hormigón. La cúpula central de ladrillo, nervada, siguiendo el modelo de Armenteira y todo ello fundido con la época del arquitecto, cromatismo en los mosaicos y en otros elementos metálicos.
Templo Votivo do mar
Su inclinación hacia el regionalismo arquitectónico propició su amistad con Valentín Paz-Andrade y Castelao, aunque nunca llegó a adquirir un compromiso ideológico: sus colaboraciones con el periódico Galicia convivían con escritos, como en el proyecto no realizado de reestructuración de la Puerta del Sol de 1919, retomado tras el fin de la Guerra Civil, en el que se ensalzaba la Hispanidad. Fue miembro numerario de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, y en 1924 fue nombrado hijo predilecto su ciudad natal. En su memoria, el ayuntamiento de Porriño instituyó en 1999 el premio anual de arquitectura en granito Antonio Palacios.
Palacios murió el 27 de octubre de 1945 en su casa madrileña de El Plantío, dejando inacabada la construcción de la iglesia de Vera Cruz en la localidad gallega de O Carballiño.

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